El convencimiento de que la forma de abordar el aprendizaje de idiomas en España se podía mejorar fue el germen de este proyecto.
Innovamos y apostamos por una metodología fresca adaptada las necesidades de negocio reales. La acompañamos con el mejor equipo: Joven, preparado y, sobre todo, con muchas ganas de aprender.
Como no podía ser de otra manera los hitos fueron llegando. Hitos que echando la vista atrás nos hacen sentir muy orgullosos:
Hemos conquistado a las empresas más punteras del país: Desde Spotify, hasta Fcc pasando por Mrw, Acciona, Accenture o Nivea.
Trabajamos a nivel nacional: Desde Bilbao a Las Palmas de Gran Canaria… y a nivel internacional con clases en Londres, en Pori (Finlandia) o en Dublin. Si, aunque suene sorprendente, damos clases presenciales en Londres.
Un equipo de soñadores, profesores, colaboradores, partners que trabajan día a día para satisfacer al cliente.
Un entorno familiar y de amigos que, a pesar de dudar de la idoneidad del proyecto, siempre lo han apoyado.
Diez años, marcados por una de las crisis más importantes que ha vivido este país, gracias a la cual nos hemos reinventado día a día, descubriendo sin saberlo la clave de la supervivencia: la adaptación al cambio.
Esta supervivencia y posterior crecimiento demuestran que creyendo se llega y que bajo el paraguas de la honestidad, perseverancia, buen hacer y respeto también se consiguen las cosas.
La regla de 150 es una teoría acuñada por Jeremy Kourdi, autor de ‘100 grandes ideas de negocio de compañías
En un hotel, un restaurante o una agencia de viajes, cada palabra cuenta. Un saludo cordial, una recomendación precisa o
En los entornos laborales más innovadores, la mejora continua ya no se limita a procesos o productos: también se espera
Una cláusula mal interpretada. Una palabra mal escogida. Un tecnicismo que cambia el sentido de todo un contrato. En el
En América Latina, el éxito de una negociación rara vez se decide solo por la calidad de la oferta. Lo
En un entorno laboral marcado por la diversidad, las reuniones ya no pueden ser espacios donde solo unos pocos hablan